El conocimiento no es una invención, sino un hallazgo.
Es un hecho irrevocable que esta sentencia aquí arriba, es una verdad absoluta, profundamente comprobada. También cabe recordar que, para ser merecedores de poseer la vibración que nos permita recibir ese hallazgo, es esencial transformarnos en terreno fértil para que se manifieste el conocimiento y su frecuencia.
Hay una línea jerárquica en lo que respecta al conocimiento, en relación a como vayamos limpiando el filtro que cubre nuestros ojos, podremos ir percibiendo diferentes niveles de comprensión del conocimiento.
Este se nos presenta constantemente, e incluso puede ser un conocimiento previamente comprendido. Solo que, en el transcurso de nuestra evolución, la percepción que recibimos es transformada en una versión diferente del mismo, más profunda.
En toda nuestra vida, no paramos de recibir regalos constantes, que nos predisponen a la transición necesaria para el siguiente conocimiento y consecuentemente, también será fuente de una apertura a lo que así se manifieste posteriormente.
Pulir el diamante interno del cual estamos compuestos, es nuestra responsabilidad y nuestro derecho. La limpieza es necesaria, para poder transformarnos en un constante receptor de información.
De esta manera, no solo mejoraremos el mantenimiento de esta maravillosa máquina que nos fue predispuesta por karmas previos, sino que también, ayudaremos constantemente a todos los que se nos acerquen.
Cuando hallamos las ideas, o se manifiesta ante nosotros un conocimiento que previamente desconocíamos, es porque está sucediendo una ruptura de algún “bloqueo kármico”. Este desbloqueo nos permite ser merecedores de una nueva información, que nos va preparando para la momentánea continuidad de hechos, que nos termina llevando a una comprensión superior ininterrumpida.
Fertilizando la inteligencia
Una vez, viajando por las montañas de los Himalayas, me tuve que quedar en una aldea donde me informaron de un detalle, más que interesante. Ellos acostumbraban a plantar ajo y cebolla antes de cualquier plantación de otros vegetales, debido a las cualidades de estos bulbos.
Como es bien sabido por todos, estos son intensos y cambian el gusto de una comida, pero también tienen mucho potencial curativo. Ahora bien, estos aldeanos me explicaron que tienen la cualidad de adquirir y transformar la energía negativa de la tierra, transformándola en una tierra muy fértil para otras cosechas.
De la misma manera que el ajo y la cebolla, nuestras acciones son potenciales purificadores del intelecto, tanto y en cuanto nosotros las direccionemos hacia esa meta. Con respecto a cómo actuemos, lograremos ver que nuestra ley de atracción natural se conectará y generará nuevas variantes de ideas: “conocimiento y su frecuencia”. Asimismo, nos prepararán para la compulsoria batalla que tendremos que enfrentar con nuestra disonancia cognitiva.
Esta disonancia no es más que el conflicto mental que ocurre cuando los comportamientos y creencias no se alinean.
Puede ocurrir cuando tenemos dos creencias que se contradicen entre sí.
La disonancia cognitiva provoca sentimientos de malestar y tensión, y muchas veces intentamos aliviar esta incomodidad de diferentes maneras. Explicó sobre este tema a profundo aquí.
La naturaleza, el disfrutador y la conciencia
El capítulo quince del Bhagavad Gita es único en varios aspectos. Es el más corto, con solo veinte slokas y resume la esencia de todos los Vedas. Específicamente, cubre cuatro temas:
- Qué es el mundo
- Quién soy yo
- Qué es Dios y qué trasciende al mundo y a mí
- Cuál es la relación entre mi persona, el mundo y Dios.
El punto número uno aborda nuestra existencia en este mundo y se ilustra usando un árbol baniano al revés. La raíz de este árbol es Krishna (el controlador supremo) ejerciendo el poder en Prakriti (los elementos materiales), el saguna brahman, (la esencia eterna con atributos). El Samsara, nuestra existencia en este mundo, es el crecimiento exterior de este árbol. Este crecimiento es alimentado por los objetos de los sentidos que tienen la forma de brotes o capullos. Cada objeto de los sentidos genera deseos, lo que genera acciones, que nos atan a las ramas del árbol.
La única forma de librarnos de este ciclo interminable de deseo y acción, es cortar el árbol usando el arma del desapego, yendo directamente a la fuente del árbol, refugiándose en Krishna. Un buscador que quiera hacerlo necesita una lista de calificaciones tales como la libertad del orgullo y la ilusión. Aquí es donde entra la importancia de fertilizar nuestro intelecto para ser merecedores de la autorrealización y consecuente liberación.
A continuación en el punto dos, el capítulo aborda el estado del alma individual, el “Yo”. Desde un punto de vista absoluto, hay una esencia eterna, una conciencia, un “yo”. Pero así como el espacio parece estar dividido en muchos a través de paredes, esta esencia eterna es como si estuviera dividida en múltiples “yoes” a través de aparentes limitaciones o “upadhis”.
Al apegarse a las upadhis (limitaciones) de la mente y los órganos de los sentidos, se crea un Yo ilusorio (falso ego), que se imagina a sí mismo como el alma individual. Así, toma un nuevo cuerpo humano para agotar los deseos en su mente, pero desafortunadamente, genera nuevos deseos y, consecuentemente, necesita otro cuerpo humano una vez que el anterior deja de funcionar.
Solo aquellas personas que han asimilado la enseñanza de las escrituras después de purificarse con karma y bhakti yoga, reconocen la naturaleza no dividida del ser. Todos los demás están viviendo en el engaño de la energía ilusoria de Krishna: “Maya”.
El tercer punto, la naturaleza de Krisna (Dios), se aborda a continuación. Aprendemos que Krishna no es una figura remota, sino que impregna todos los aspectos del universo. Proporciona la conciencia o la facultad de conocer. Proporciona energía a través del sol, la luna y el fuego. Esta energía circula por todo el universo y el sabio la utiliza con fines medicinales. El metabolismo, la facultad de extraer energía de este alimento energético, se manifiesta a través de nuestra conexión con Krishna. En última instancia, toda la memoria y el conocimiento así como su frecuencia, son posibles a través de esta conexión, que reside en los corazones de todos.
El cuarto punto trata de la relación entre el individuo, el mundo y Dios. Si rastreamos la fuente de la energía de un pequeño árbol de mango y de una planta de energía solar de 1000 megavatios, llegamos a la misma fuente: el sol. De manera similar, si eliminamos mentalmente las limitaciones aparentes, las upadhis, los nombres y las formas detrás del individuo y del mundo, encontramos a la persona original, la esencia eterna pura y sin adulterar. El está más allá del mundo visible y perecedero, es la semilla imperecedera del mundo visible.
Como lo explica Krishna mismo en El Bhagavad-gita 15.15 :
sarvasya cāhaṁ hṛdi sanniviṣṭo
mattaḥ smṛtir jñānam apohanaṁ ca
vedaiś ca sarvair aham eva vedyo
vedānta-kṛd veda-vid eva cāham
“Yo me encuentro en el corazón de todos, y de Mí proceden el recuerdo, el conocimiento y el olvido. Es a Mí a quien hay que conocer a través de todos los Vedas. En verdad, Yo soy el compilador del Vedānta y el conocedor de los Vedas”.
Significado por Srila Prabhupada:
“El Señor Supremo está situado como Paramātmā en el corazón de todo el mundo, y todas las actividades tienen su comienzo en Él. La entidad viviente olvida todo lo relativo a su vida pasada, pero tiene que actuar conforme lo indica el Señor Supremo, quien es testigo de todo su trabajo.
En consecuencia, ella comienza su trabajo de conformidad con sus acciones pasadas. El conocimiento necesario se le provee, y se le proporciona el recuerdo, y además ella olvida lo que se refiere a su vida pasada. Así pues, el Señor no solo es omnipresente; Él también está localizado en el corazón de cada individuo. Él otorga los diferentes resultados fruitivos.
Él es venerable no solo como el Brahman impersonal, como la Suprema Personalidad de Dios y como el Paramātmā localizado, sino también como la forma de la encarnación de los Vedas. Los Vedas le dan la guía indicada a la gente, de modo que esta pueda moldear su vida como se debe e ir de vuelta a Dios, de vuelta al hogar.
Los Vedas ofrecen conocimiento acerca de la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, y Kṛṣṇa, en Su encarnación de Vyāsadeva, es el compilador del Vedānta-sūtra. El comentario que, en forma del Śrīmad-Bhāgavatam, le hizo Vyāsadeva al Vedānta-sūtra, brinda la verdadera explicación sobre esa obra.
El Señor Supremo es tan completo, que, para la liberación del alma condicionada, le provee a esta de comida y se la digiere, le sirve de testigo de sus actividades, le proporciona conocimiento en la forma de los Vedas y, como la Suprema Personalidad de
Dios, Śrī Kṛṣṇa, es el maestro del Bhagavad-gītā. Él es digno de la adoración del alma condicionada. Luego Dios es supremamente bueno; Dios es supremamente misericordioso.
Antaḥ-praviṣṭaḥ śāstā janānām. La entidad viviente olvida todo en cuanto abandona su cuerpo actual, pero comienza su trabajo de nuevo, iniciada por el Señor Supremo. Aunque ella olvida, el Señor le da la inteligencia para renovar su trabajo donde lo terminó en su última vida.
De modo que, la entidad viviente no solo disfruta o sufre en este mundo según las órdenes del Supremo que está situado localmente en el corazón, sino que además recibe la oportunidad de entender los Vedas con Él.
Si uno está interesado en entender el conocimiento védico, entonces Kṛṣṇa le da la inteligencia necesaria para ello. ¿Por qué presenta Él el conocimiento védico para su estudio? Porque la entidad viviente necesita entender a Kṛṣṇa individualmente. La literatura védica lo confirma: yo ’sau sarvair vedair gīyate.
En toda la literatura védica, comenzando con los cuatro Vedas, el Vedānta-sūtra y los Upanishads y Purāṇas, se celebran las glorias del Señor Supremo. A Él se llega por medio de la ejecución de los rituales védicos, la discusión de la filosofía védica y la adoración de Él mediante el servicio devocional.
Por lo tanto, el propósito de los Vedas es el de entender a Kṛṣṇa. Los Vedas nos dan indicaciones para entender a Kṛṣṇa y el proceso para comprenderlo a Él perfectamente. La meta última es la Suprema Personalidad de Dios.
El Vedānta-sūtra (1.1.4) confirma eso con las siguientes palabras: tat tu samanvayāt. Uno puede lograr la perfección en tres etapas. Por medio de la comprensión de la literatura védica, uno puede entender su relación con la Suprema Personalidad de Dios; por medio de la ejecución de los diferentes procesos, uno puede acercarse a Él; y al final, uno puede llegar a la meta suprema, que no es otra que la Suprema Personalidad de Dios.
En este verso, el propósito de los Vedas, la comprensión de los Vedas y la meta de los Vedas se definen claramente”.
Nuestra descalificación es nuestra mejor cualificación
Tomar conciencia de nuestra realidad interna, implica que despertamos a la comprensión de nuestra evolución constante. Para establecernos en un camino intenso y profundo, necesitamos hacer prácticas que nos apoyen. Aquí les dejo el secreto más guardado y a la vez más poderoso, la terapia por excelencia para kali yuga. El conocimiento y su frecuencia en su máxima expresión.
Desde tiempo inmemorial, en la antigua Baratha Varsha (India) se practican terapias de mantras védicos y cualquiera puede realizar fácilmente el proceso del canto trascendental. Incluso, si uno no está en buenas condiciones físicas, está clasificado por debajo de los demás, carece de calificaciones materiales o no está elevado en términos de actividades piadosas, la repetición constante de mantras como terapia es tremendamente beneficioso.
Un nacimiento aristocrático, una educación avanzada, hermosos rasgos corporales, riqueza y resultados similares de actividades piadosas, son todos innecesarios para el avance en la vida espiritual. En kali yuga, todos los procesos de yoga se postran a los pies de la repetición constante del “maha mantra” y sus resultados están avalados por millones de sabios que lo corroboran.
Se entiende de la fuente autorizada de la literatura védica que, especialmente en esta era de Kali-yuga, la gente es generalmente efímera, superficial, extremadamente mala en sus hábitos e inclinada a aceptar métodos de terapias y yoga que no son genuinos. Además, siempre están perturbados por las condiciones materiales y, en su mayoría, son desafortunados.
Por lo tanto, en el Chaitanya Charitamrita, Adi-Lila, 7. 76 se recomienda:
harer nāma harer nāma
harer nāmaiva kevalam
kalau nāsty eva nāsty eva
nāsty eva gatir anyathā
“En esta época de disputas e hipocresía, el único medio de liberación es el canto del Maha Mantra. No hay otra manera. No hay otra manera. No hay otra manera.”
Simplemente por cantar el Maha Mantra uno puede avanzar perfectamente en la vida espiritual. Este es el mejor proceso para el éxito en la vida. En otras eras, el canto del Maha Mantra es igualmente poderoso, pero especialmente en esta era de Kali-yuga, es más poderoso.
kīrtanād eva kṛṣṇasya mukta-saṅgaḥ paraṁ vrajet
Simplemente por cantar el Maha Mantra, uno se libera de los condicionamientos materiales y alcanza comprensión espiritual.
Por lo tanto, incluso, si uno es capaz de realizar otros procesos de bhakti yoga, también debe adoptar el canto del maha mantra como método principal para avanzar en la vida espiritual.
Activando así la frecuencia del alma y generando consecuentemente conocimiento del todo absoluto.
HARE KRISHNA HARE KRISHNA
KRISHNA KRISHNA HARE HARE
HARE RAMA HARE RAMA
RAMA RAMA HARE HARE
Srimad Bhagavatam 11.5.32:
kṛṣṇa-varṇaṁ tviṣākṛṣṇaṁ
sāṅgopāṅgāstra-pārṣadam
yajñaiḥ saṅkīrtana-prāyair
yajanti hi su-medhasaḥ
En la era de Kali, las personas inteligentes realizan meditación a través del Mantra Hare Krishna para adorar a la encarnación de Dios llamada Chaitanya Mahaprabhu. Aunque Su tez no es negruzca, Él es Krishna mismo. A Él lo acompañan Sus asociados, sirvientes, armas y compañeros confidenciales.
Aquellos que tienen una inteligencia muy aguda, comprenden las cosas por experiencia directa, el método científico se establece como un hecho irrevocable. Cuando estas personas se establecen en la terapia de repetición de mantras, los resultados se manifiestan en muchos aspectos.
Místicamente, el intelecto comienza a expandirse, la armonía se genera en nuestra mente y consecuentemente empezamos a generar una metamorfosis profunda, en nosotros y en todo nuestro entorno. Adoptar este proceso del canto del maha mantra es la prueba de una inteligencia muy refinada.
Nos vemos en el próximo post!!!
Radhe Radhe
Lila Madhava
